NO PUEDE HABER COMPROMISO FIRME SIN OBJETIVOS ESCRITOS.
Sí has llegado hasta aquí significa que estás dispuesto a dar el paso definitivo para tomar las riendas de tu vida. ¡Enhorabuena!
Recuerdo que, al finalizar el entonces servicio militar obligatorio – es decir la otrora conocida popularmente como “la mili” –, en la cartilla de prestación de servicios se indicaba de forma manuscrita junto a la palabra “valor” los términos “se le supone.” Sí has llegado hasta aquí, también se supone que tienes el firme compromiso para alcanzar tu o tus objetivos, que has estado pensando en ellos y que en definitiva estás convencido en iniciar el camino del cambio para alcanzarlos.
Es curioso, pero en este punto es donde empezamos a fracasar. Y lo sé por propia experiencia.
Del mismo modo que en EL MUNDO COMERCIAL el objetivo final siempre es la venta, si a la postre no cerramos ésta, por mucho que hayamos trabajado y gastado nuestro – recuerda – valioso tiempo, nos habremos quedado en la orilla y te aseguro que no hay ni medalla de plata ni premio para el finalista.
De este modo, el paso básico y no siempre sencillo, es sincerarnos con nosotros mismos y dejar por escrito nuestra lista de objetivos. Puedes hacerla en cinco minutos o bien necesitar mucho más tiempo. No tiene que ser perfecta: lo verdaderamente importante es no empezar sin tener tu lista hecha.
Tu lista de objetivos será tu brújula que te conducirá hacia tus metas.
Sin ella, caeremos en la indefinición y no pasaremos de tener solamente buenas intenciones. Recuerda que tus hábitos actuales te conducen a tu rutina diaria y ésta a arrinconar poco a poco tus metas. Si las tienes a mano y las lees todas las semanas, serán mucho más consistentes y te recordarán que tienes un compromiso.
Una vez que ya estés en marcha, con tu lista delante podrás hacer el seguimiento, añadir, quitar y replantear cosas sin perder la esencia y la finalidad.
No se puede correr sin antes dar los primeros pasos, siendo éstos los más difíciles. Una vez estés avanzando a tu ritmo, pero avanzando, todo será mucho más sencillo y, para cuando tengas una segunda lista, tendrás ya mucho ganado.
CONSEJOS PARA DEFINIR TU LISTA DE OBJETIVOS.
Empieza con un borrador, anotando:
- Tus valores y tus deseos y lo que no te gusta de tu entorno.
- Su grado de prioridad para ti.
- La clasificación por tipo (personales, profesionales, de salud, económicos…)
Luego sigue con:
- Céntrate en tu primer o primeros objetivos. Es importante que sean realistas y concretos. Sí son muy ambiciosos, mejor subdividirlos. Si son abstractos, serán difíciles. No los tengas en cuenta.
- Márcate un timing, un tiempo para lograrlos. Este punto puede agobiar, pero es necesario. Sé aquí generoso. Recuerda que lo importante es siempre avanzar. Monta en tu smartphone un sistema de alertas y de alarmas que se adapte a tu disponibilidad para que te sirva de recordatorio y de agenda. Del mismo modo que dedicas un día al mes a revisar tu cuenta bancaria, haz lo mismo, por ejemplo, con la revisión mensual de tus objetivos. Te será de gran ayuda.
- Concretar los recursos previstos para llegar a cada meta. Me refiero principalmente al tiempo que vas a dedicar al esfuerzo: el cómo, el dónde y el cuándo. Estamos hablando de sacrificio personal.
- Determina el nivel necesario de conocimiento que precisas para cada uno de ellos, si te vas a formar leyendo libros especializados, viendo tutoriales, asistiendo a clases…
Y la parte final:
- Imprime tu lista y haz una copia. Deja espacio suficiente para escribir.
- Tenla siempre a mano.
- Indica en ella siempre la fecha de tus revisiones y modificaciones. Te ayudará a valorar tu seguimiento.
Con tu LISTA HECHA, ya podemos empezar: BIENVENIDO A MUNDO COMERCIAL, pero antes te recomiendo un esfuerzo adicional (mejor dicho dos) siguiendo las siguientes entradas:
- RESUMEN 4 PASOS PARA EL CAMBIO. (7/4/2018)
- +PRODUCTIVIDAD.
